¿EL EMBARAZO Y LA QUIROPRÁCTICA?
Durante el embarazo llegan numerosos cambios en poco tiempo, ya sean posturales, hormonales o emocionales. El cuerpo de la mujer embarazada hace todo lo posible para permitir y ayudar el desarrollo del bebé.
- Aumento de peso, particularmente en la parte de la barriga causando así un desplazamiento del centro de gravedad hacia delante, por lo que la lordosis de las lumbares aumenta.
- Aumento del tamaño de las mamas contribuyendo así al aumento del peso. Sigue una modificación postural de la columna dorsal, del tórax, de los hombros y de la cabeza.
- Aumento del volumen sanguíneo, necesitando una vigilancia especial sobre la presión arterial.
- Tensiones a nivel de los ligamentos redondos del útero, creando dolores en la ingle y en la parte inferior del abdomen.
- Desplazamiento de los órganos hacia atrás y hacia arriba para crear más espacio para el útero. La madre siente un peso a nivel del diafragma. La respiración es más difícil y hay una posibilidad de reflujos ácidos.
- Aumento de la secreción de las hormonas, principalmente la relaxina que permite a las articulaciones ganar en elasticidad. Así, la pelvis puede adaptarse, las articulaciones sacro-iliacas y lombo-sacrales son más móviles. Aparecen dolores a menudo por culpa de estas tensiones. Una ciática es un síntoma muy corriente. Esta inestabilidad necesaria es a veces dolorosa cuando las tensiones están enáguales.
EL QUIROPRÁCTICO:
El objetivo de la atención quiropráctica es ajustar el conjunto de sistemas o áreas del cuerpo que experimentarán cambios significativos a lo largo de los diferentes trimestres del embarazo.
A menudo es causado por el hecho de que el movimiento del feto en la cavidad pélvica es limitado. Estamos más que nunca buscando una pelvis equilibrada, tensiones relajadas ...
Esta técnica es una de las herramientas del análisis específico del sacro que permite su corrección de manera suave y precisa. Los ajustes quiroprácticos ayudarán naturalmente al feto a moverse en su posición adecuada.
El trabajo del quiropráctico puede reorientar el equilibrio, reducir estas tensiones, a veces poco comprensivas, pero también garantizar que el sistema nervioso de la madre funcione correctamente.
LA TECNICA WEBSTER
El cuidado quiropráctico en el embarazo es vital para la función fisiológica normal de la madre y del bebé durante el embarazo y el nacimiento. Cada vez más mujeres y profesionales que atienden en el momento del parto están descubriendo los beneficios asociados con el cuidado quiropráctico durante el embarazo y reconocen esta área de especialización a través del ICPA Webster Certification.
La técnica Webster es un análisis y ajuste quiropráctico específico. El objetivo del ajuste es reducir los efectos del desequilibrio de la pelvis. En el embarazo, el desequilibrio de la pelvis puede afectar a la comodidad de la madre y al desequilibrio del bebé. El desequilibrio pélvico puede afectar a la progresión del parto, lo que suele llevar a una intervención innecesaria. El desequilibrio de la pelvis afecta negativamente a la función del nervio uterino, la estructura de la pelvis y puede obstaculizar la capacidad del bebé para obtener una posición óptima. Estas son causas de distocia o parto difícil y estancado.
La técnica Webster ayuda a lograr un estado de equilibrio en la pelvis óptimo que puede contribuir a un parto más fácil y seguro.
